Abigail Lasalle: “Mi pasión y mi libido están puestas en mi trabajo”

Televisión noviembre 19, 2019

La periodista y conductora visitó "Slow" para hablar sobre su carrera y su presente.

Abigail Lassalle es una periodista que conduce los programas “Minuto a minuto”, “Imagen de Trabajo” y “El último de la semana”, en la pantalla de C5N. Además, lleva adelante el programa de radio “¿Cómo es posible?” en Conexión Abierta. La locutora habló sobre su rutina laboral. “Ningún día es parecido a otro porque también a mi me aburre mucho mantener la rutina de la misma forma, por eso no podría haber sido oficinista nunca. No sería un trabajo de placer. Al no tener horario me manejo, voy, vengo, entro, salgo. Los lunes por lo general, como termino tarde el domingo a las 12 de la noche en el canal, me lo dedico a hacer nada, terapia quizás. Ni tramites hago, hago todo por internet. No tengo horario para levantarme, lo hago cuando el cuerpo se me despierta. Después por ahí me voy todo un día a buscar ropa o me voy un día entero a ver a mi vieja. Grabo los jueves a la mañana entonces hay algunos días más colmados que otros”.

 En ese contexto, la conductora habló sobre su amor por la radio. “La radio era una asignatura pendiente porque hacía muchos años ya, desde el 2014 que no hacia radio y para mí era una eternidad estar cinco años sin hacer radio. Soy más bicho de radio que de televisión. Tiene una magia, una cosa especial, te enamora mucho. No solamente te acompaña sino que además hay un universo del otro lado, que no sabes a cuanta gente llegas y que para él la palabra tuya es tan importante. Me parece maravillosa esa magia que tiene la radio. Me gustaría estar trabajando mucho más en radio de lo que estoy trabajando hoy, porque tengo solamente los miércoles de 13:00 a 15:00 en Conexión Abierta”.

La conductora recordó el programa de madrugada que condujo en C5N “De 1 a 5”. “Cuando empecé a hacer el programa pensaba “¿quién mierda va a estar mirando esto a esta hora?”. Me di cuenta que lo miraba mucha gente. Lo miraba la mamá que se despertaba a dar de mamar al nene, el encargado del edificio, el seguridad de alguna empresa, el que estaba estudiando. Entonces llegaban un montón de mensajes. Era muy loco, era una cuestión de compañía, de hacer reír. Ahí me di cuenta lo importante de mi trabajo. En la radio, como siempre fui locutora acompañante de alguien más, por ahí mi palabra no tenia tanto peso. Mi palabra era como más graciosa y acotada. En ese programa si me di cuenta de lo valiosa que es mi palabra y que hay mucha gente del otro lado esperando.” En ese marco, la locutora agregó que “ese programa fue un antes y un después. Me dio la posibilidad de cambiar porque yo vengo de la tele vieja, de la tele estructurada, muy seria, paradita, derechita. Cuando empecé en el canal era la típica conductora de noticiera de la época de Romay. Después fue relajarme, me senté un día en casa y me dije “o cambias o si no te quedas afuera”. Entonces tuve que cambiar. En un momento me empecé a divertir, a tomar mate, a bailar, a decir pavadas, a permitirme hacer el ridículo. Fue un antes y un después. A partir de ahí no volví más”.

La locutora habló sobre las maneras en las que logra desenfocarse de la vorágine diaria. “Los sábados cuando hago “Minuto a minuto” de 17:00 a 21:00 por C5N, salgo y no quiero saber más nada de nada. Ni de lo que pasa en el mundo ni el país. Saco enchufe de todo, voy a series, a películas, salgo afuera. Los sábados son muchas horas de mucho pegue, para colmo C5N muestra mucha información dura. No tengo a donde descargar pero hace poco empecé con el reiki. Soy una mina muy especial, cuando no me gustó la primera no vuelvo por una segunda oportunidad. O conecto o no conecto con la vibra. Si no tengo vibra no lo hago”.

Además, la conductora agregó que “manejar me relaja. Me gusta mucho manejar. Voy con música. Es maravillosa la ruta, no hay nadie. Trato de ponerme música zen o música relax. Respiro en el auto. En casa hago meditaciones y respiraciones, soy de las esencias, de los sahumerios, del hornito, de todo eso. Soy de tener, considero que no hay que tener una sola protección, tenés que tener varias, más allá de la religión que uno predique o haga. Tengo elefantes, los budas, tengo de todo. Tengo una lechuza grande que la puse mirando a la puerta. Tengo mi sanador que me cuida, me cura, siempre me tiene en el altarcito. Hace rato que no voy. Empezó como si fuera profesional-paciente y después nos hicimos tan amigos que me mira a distancia y él me mira, me trabaja, me equilibra”.

Al finalizar, Abigail Lasalle habló sobre el privilegio de poder trabajar de lo que ama. “Los que tenemos la posibilidad de trabajar en lo que nos gusta somos pocos. Mi sueño quizás sea trabajar en tal radio entonces quizás no llegas ahí pero trabajas en otra radio que te permite ejercer tu vocación. Las personas que trabajamos de nuestra vocación somos pocos privilegiados, hago mucho hincapié en eso, soy de los pocos privilegiados que considera que su profesión es su vocación y que la amo profundamente, más allá del lugar en donde esté trabajando, que me puede gustar más o menos. De todas maneras, lo hago feliz porque es mi pasión. Es la mejor pareja que he tenido. Hay mujeres que eligen armar la familia, tener los hijos y después ver que hacen con su trabajo, si hacen lo que le gusta o lo que se pueda. Yo elegí hacer lo que me gustaba, entonces relegue toda la parte de la pareja y los hijos. Mi visión y mi libido están puestas en mi profesión, en mi trabajo, en lo que tengo que hacer. Es la mejor pareja que he tenido porque me acompaña, me ayuda, me sostiene, me da de comer. Me ha dado pocas desilusiones. Cada vez me da más ganas de seguir. Este amor no se termina nunca, es fiel, es indestructible. Me tiene a mí en un lugar en donde me exige todo el tiempo a que la siga queriendo, a que el mensaje sea cada vez más fuerte para ayudar al otro. Me di cuenta estos años de realidad tan dura, de que la gente necesitaba un mensaje y que en realidad mi trabajo era para ellos, para el que menos tiene, para el jubilado, para el trabajador, para el que se estaba quedando sin laburo. Veía a los jubilados y se me caían las lágrimas porque la veo a mi vieja el día de mañana”.

 Podés escuchar “Slow” los martes de 11:00 a 13:00 horas por Zónica +.