
Alicia Castro: “Macri es el peor presidente en la historia de la democracia Argentina”
Política marzo 1, 2019La militante politica y sindical estuvo en "Intercomunicados" dialogando sobre sus inicios en la politica, su crecimiento y la actualidad.
Alicia Amalia Castro es una sindicalista, política y diplomática argentina. Ex embajadora ante la República Bolivariana de Venezuela entre 2006 y 2011 y ex embajadora ante el Reino Unido, entre 2012 y 2015, como así también representante permanente ante la Organización Marítima Internacional. Castro nació en Bahía Blanca el 27 de julio de 1949, en un hogar rosista por herencia familiar: es chozna de una tía y madrina de Juan Manuel de Rosas: “Mi chozna, la madre de mi tatarabuela, era hermana de la madre de Rosas y su madrina. En mi casa, yo estaba mucho tiempo con mis tías abuelas y como se habían casado todos muy jóvenes estaban ellas a dos generaciones de Rosas. Mi bisabuela vivió hasta los 99 años. Yo me crie en ese ambiente” contó.
En 1970 comenzó a trabajar como tripulante de cabina en la empresa estatal Aerolíneas Argentinas, donde luego fue delegada sindical y Secretaria General de la Asociación Argentina de Aero navegantes entre 1991 y 2003. Además, desde 1986 es miembro del Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte.
El feminismo que traía de la infancia la impulsó a realizar quejas por la inexistencia de comisarías de a bordo cuando eran todos hombres. Voló en la línea de bandera argentina, en total, durante 21 años. A mediados de la década de 1990 dejó el sindicalismo por la política. Junto con Juan Manuel Palacios y Hugo Moyano formaron la Unión General de Trabajadores del Transporte, que dio origen al MTA (Movimiento de los Trabajadores Argentinos).
Participó activamente de la gestión del MTA, recorrió distintas provincias y regiones solidarizándose con los trabajadores en conflicto de todo el país. Desde el MTA formó parte del grupo impulsor de la Marcha Federal en el año 1994. El 26 de julio de 1996 fue la oradora por el MTA en la Plaza de Mayo, con motivo del aniversario de la muerte de Eva Perón.
En 1997 fue elegida Diputada Nacional por la Provincia de Buenos Aires a través de la Alianza, aunque disconforme con el rumbo económico del gobierno fue la primera diputada en romper con el oficialismo bajo la presidencia de Fernando de la Rúa, combatiendo la reforma laboral impulsada por ese gobierno. “Me fui con la Reforma Laboral, fui vocera en contra de la Reforma” declaró Castro: “Fue un escándalo porque el problema era, más que las coimas, que se le sacaba salario a los trabajadores, cuando ya no había forma de sacarles más derechos.”
“Eso fue una traición de la Alianza, particularmente del Frepaso. Porque en realidad el Frepaso había operado como el garante de un gobierno progresista, de izquierda o centro-izquierda. ‘Chacho’ tuvo esa facultad extraordinaria para juntar una elite, haciendo una especie de casting de sindicalistas y de personas que habían sido relevantes en su oposición al modelo de Menem.”
“Sin embargo, inmediatamente cayó en lo mismo, porque habiendo prometido recuperar derechos para los trabajadores, largaron la reforma laboral. Me acuerdo de memoria quienes votaron a favor, por ejemplo Margarita Stolbizer, que se hace la progresista.”
“Para mí no era fácil votar en contra de mi propio partido, pero lo hice con toda mi convicción. Lamentablemente, no me equivoqué cuando advertí al bloque que era el principio del fin. Recién llegábamos al gobierno.”
“Muchas veces pienso en la gente que traiciona sus ideales, a lo mejor si se animaran a dar el paso por primera vez, verían que no es tan difícil. Cuanto más cómodo se siente uno con una materia que me parece fundamental en la política aunque esté muy dejada de lado, que es la coherencia.”
Luego fue reelecta en 2001, esta vez a través del Frente Polo Social que había fundado el sacerdote Luis Farinello, desempeñándose hasta 2005. Durante ese tiempo mantenía buenas relaciones, tanto con Cristina Kirchner como con Elisa Carrió (con ella luego se romperían). “Uno ve personajes como Carrió, que es la incoherencia caminando. No resisten archivos” señaló.
Fue integrante de las Comisiones de Transporte (vicepresidenta segunda), Libertad de Expresión (vicepresidenta primera) y Legislación del Trabajo. En el marco de su labor como diputada, en noviembre de 2003 presentó un proyecto de ley que finalmente fue sancionado, promoviendo el ingreso de Venezuela al bloque comercial Mercosur. En abril de 2006, el entonces presidente Néstor Kirchner la designó embajadora argentina ante Venezuela, cargo que asumió formalmente el 3 de julio de ese año.
La sindicalista recordó a Hugo Chávez como un gran líder: “Creo que el más grande de los líderes latinoamericanos que he conocido personalmente, porque fue el que se puso al hombro la unión de América Latina y el Caribe con un verdadero sentido de recuperación del ideal bolivariano, el ideal sanmartiniano, de nuestros libertadores.”
“Recordemos en épocas que nos tratan de borrar la historia, borrar la memoria, borrar la mente, para que pueda haber un gobierno que está produciendo un verdadero saqueo. No sólo económico, sino también de valores. Entre esos valores, está el borramiento de la historia. Macri inauguró pidiéndole perdón al rey de España diciendo que se sentirían angustiados nuestros libertadores, los que habían hecho el acta de la Independencia.”
“San Martín y Bolivar concebían el bienestar de nuestros pueblos con dos elementos que tenían que ser necesariamente relacionados, la independencia y la unidad. Por eso San Martín presionó al Congreso de Tucumán para que declararan la independencia, porque debía ser una gesta latinoamericana. No sirve ni entonces ni ahora la independencia de uno sólo de los países de la región, porque solos somos muy vulnerables, pero unidos somos muy fuertes.”
“Chavez, que era un maestro y profesor de historia, una persona que le importaba muchísimo darle claridad, inteligibilidad a la política, se dedicó a concientizar grandes masas, no sólo en su propio país, sino en todo américa. Este ideal bolivariano fue cundiendo, y pasamos ese período extraordinario donde él fue el gran arquitecto de la unidad, que coincidieron con los gobiernos de Lula, de Evo Morales, los Kirchner, Rafael Correa, Lugo, etcétera. Una conjunción extraordinaria de líderes que, como decía Cristina, nunca se habían parecido tanto a sus pueblos. Se aprestaron a darle institucionalidad al ideal de la unidad latinoamericana.”
En referencia al discurso de Mauricio Macri en la apertura de Sesiones, Castro detalló: “No escuché el discurso de Macri porque soy una señora que tiene que cuidar sus arterias. Después lo leo y ya conozco algunos párrafos y la síntesis de mentiras que ha dicho pero no lo puedo escuchar en vivo. Viniendo a la radio estaba leyendo un texto de un psicoanalista que habla del discurso de Macri como el discurso del psicópata, quien dice que niega y tergiversa lo que podemos percibir por nuestra propia experiencia lo cual es enloquecedor; pone a la víctima en el lugar culpable de su propio sufrimiento lo cual genera el efecto de confundirla y deprimirla; no se responsabiliza por sus actos sino que estos siempre responden a la acción de otros de lo cual él es la víctima inocente: la herencia recibida, ¿no? Y por último, ejerce una violencia arrasadora con una sonrisa, buenas maneras y palabras tranquilizadoras lo cual adormece, hipnotiza y confunde. ‘Es por tu bien’ dice, mientras lastima y destruye”.
Firme y segura, remarcó que “Macri es el peor Presidente que ha tenido la historia de la democracia Argentina. No hemos tenido un peor presidente en varios sentidos”. Asimismo, aseguró que este discurso es el de un Macri que se va: “Es el discurso de un Macri terminado, es el discurso final de un Macri terminado”.
Entre 2012 y 2015 se desempeñó como embajadora argentina ante el Reino Unido, trabajando principalmente sobre la cuestión de las islas Malvinas. Fue designada en el cargo en medio de la crisis diplomática por la soberanía de las islas Malvinas en los años 2010. La embajada había quedado vacante desde la jubilación de Federico Mirré en 2008 como símbolo de la decepción de Argentina con el manejo del gobierno británico sobre la disputa de soberanía.
La disputa de las Malvinas ha dominado las actividades de Castro como embajadora en el Reino Unido. El 30 de abril de 2012 se enfrentó públicamente con el secretario de Relaciones Exteriores británico, William Hague, en la presentación del informe anual sobre derechos humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Mancomunidad de Naciones. Después de la muerte de Margaret Thatcher, que había sido primera ministra del Reino Unido durante la guerra de las Malvinas, Castro fue invitada a asistir al funeral el 17 de abril de 2013, pero declinó la invitación.
En noviembre de 2012, a raíz de la Retención de la Fragata Libertad en Ghana, Castro demostró ante la Organización Marítima Internacional (OMI) que la Fragata Libertad era un buque de guerra. Previo a ello, la Argentina se había dirigido a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el planteo de que Ghana afectó el sistema de inmunidades de los Estados que rige a la comunidad de naciones, al no ser respetada la inmunidad de una embarcación militar. Por otra parte, la embajadora Alicia Castro señaló que “resulta preocupante que algunos legisladores y medios de prensa argentinos difundan falsas informaciones que podrían perjudicar la situación argentina frente a las ávidas demandas de los fondos buitre y en contra del interés nacional”.
En diciembre de 2015, dejó el puesto tras el fin del mandato de Cristina Fernández de Kirchner, quedando la embajada bajo el encargado de negocios Oscar Horacio Galli, hasta que Mauricio Macri designó a Renato Carlos Sersale Di Cerisano. Tiempo más tarde, Castro opinó acerca del nuevo gobierno, declarando que “es una vergüenza que el gobierno argentino no haya mencionado el reclamo de diálogo por Malvinas cuando Macri se reunió personalmente con David Cameron en Davos, Suiza”.
* Podés escuchar “Intercomunicados” los viernes a las 17h por La RZ.