Miércoles 1 de Mayo de 2024 - 12:14 am

Eduardo Blanco: “Es aventurero el recorrido de componer a un personaje”

Teatro enero 29, 2024

El actor argentino de cine, teatro y televisión visitó a "Viva el Teatro" y conversó sobre su trayectoria.

El artista y reconocido actor ha trabajado en innumerable cantidad de obras, tanto de cine como de teatro y televisión, dejando una huella imborrable. En ese sentido, nos visita en Viva el Teatro para recordar desde su infancia hasta la actualidad, con su obra Parque Lezama. No obstante, los espacios de reflexión y de anécdotas como cuando conoció para luego trabajar junto al mismísimo Campanela.

Reflexiona sobre la infancia: “En ese momento se jugaba en el potrero. Estaba todo el día en la calle, no había peligro por esas cosas, y la sumatoria de aventuras más allá del Colegio, más allá de la familia, la calle también era una formadora”.

A los 11 años se cree que te probaste en Platense: “No lo que pasa que yo en esa época vivía en Florida, en el barrio Florida, Vicente López e iba al Colegio Primario Florida y Platense donde hoy tiene la cancha de fútbol, tiene el club, pero la cancha no la tenía ahí, la cancha estaba en capital en Manuela Pedraza y Cramer. Porque era el club de fútbol, el barrio más cercano que teníamos y porque la prensa era como mi segundo equipo porque a mi viejo no le gustaba el fútbol, pero a mi tío sí, su hermano sí, y eran de Platense, entonces los de Platense siempre me los llevaban a ver. Obviamente íbamos a la tribuna de platense, pero desde ahí adquiriendo como un cariño. Y bueno, sí, no fui yo solo, fuimos obviamente los pibes del barrio y del colegio a probarnos, pero, no pasó más de ahí. Una vez lo dije en un reportaje y después todas las preguntas que siguieron en distintos reportajes según el fútbol o a mi participación como futbolista, parece que yo hubiera jugado en la selección”.

Hubo un mandato familiar ligado a tu profesión. No estaba previsto que seas actor, sino que más bien, un ingeniero mecánico. Es decir, nada que ver con lo que realmente te apasiona: “¿Sabés que pasa? El tema de la vocación es un tema complejo y que nos acompaña desde una determinada época, se queres decir que nos acompaña, porque yo quiero decir que todavía es un tema. No se educa para que uno pueda descubrirla o si la la puede desarrollar y demás, la vocación que sea, o las vocaciones que sean. En esa época yo estaba en el colegio primario. Te imaginas que mucho menos y yo tenía que ir al secundario. Y yo no tenía la menor idea y no es que me dijeron, vos tenés que ser tal cosa, pero verdaderamente mi padre era mecánico. Supongo que a lo mejor ni ellos mismos tenían ni idea de que secundario mandarme entonces le pareció eso, porque yo hablo de mis 12 años. En esa época uno no tomaba solo esa decisión en ese sentido. Si me pregunta que me gustaba hacer a mí y a mí me gustaba ir al cine y jugar a la pelota. Si tuviera que decirte cosas que me gustaban, eran esas. Entonces decidieron que para mí lo mejor era el colegio secundario industrial y después para poder estudiar ingeniería. Entonces no es que fue una obligación feria. Fue simplemente que estaba cantado que siga la universidad”.

¿Todavía recordás la vez que fuiste a ver Esperando la Carroza? Esa obra que marcó un antes y un después dentro de la cultura argentina: “¿Cómo no me voy a acordar? Pero era obra de teatro todavía no estaba hecha la película. Habrá sido en el año ´75. Eramos chicos. Recuedo que fue la primera vez que fui al teatro y además es una obra queda mucha vida. Era maravillosa”.

Siempre hablás con mucho afecto, con mucho amor a tu primer maestro que te enseñó a amar al teatro. ¿A qué se debe eso?: “Los primeros pasos son fundamentales para desarrollarse en lo que uno ama o desea o para abandonar también. Siendo muy joven, tuvo por la pasión que le generaba el teatro, la capacidad de cuidar mucho lo que él enseñaba y de desarrollar el teatro independiente. Hoy y a la distancia te digo que era solo pasión y ganas de transmitir y expresarse. Contar cuentos y participar en ellos. Y claro, todavía al día de hoy seguimos siendo amigos. De él y de los integrantes de algunos de ese grupo cuando teníamos 17 años”.

Hay una historia muy bonita detrás de cómo conociste a Campanella, uno de los directores más importantes, ¿cómo fue eso?: “Con un amigo funcionábamos como grupo de teatro para ensayar para que él de las clases y entonces había conseguido un espacio. Es importante decir que hablamos de los años 70. Entonces lo colegios privados de Vicente López tenían teatros. En espacios que no los usaban y tampoco estaba la materia teatro. ¿Qué pasó con el grupo independiente? Con un compañero que vivía en Vicente López salimos al recorrer colegios y espacios teatrales donde pudiéramos ensayar las obras y que sea un lugar para desarrollarnos. Y en una de esas caímos en el colegio San Gabriel de Vicente López, que fue el colegio que nos aceptaron para funcionar los sábados a la mañana que Norberto podía dar clases o lo que tuvieron que hacer, como si el Grupo que conformamos, pero con la condición que los alumnos de quinto año que desarrolle ese año ese colegio que quisieran participar en la clase de teatro pudieron hacer. Y efectivamente, así fue el día que fuimos ahí ese sábado y había como 20 chicos, chicos y chicas que se sumaban a este grupo, no este bueno, por supuesto, se hace una preselección natural en el sentido que alguno viene la primera vez, la segunda dejan de venir. ¿Pero bueno, pero cuánto quedaron estos chicos? Nosotros conocíamos que eran de quinto año. Era acompañado de Campanela”.

Hablemos de Parque Lezama, un éxito de hace más de 10 años y que todo público recuerda a tu personaje. ¿Cómo fue la composición del mismo?: “Como todo, un recorrido, un camino. No es que un día llegué al ensayo y ya estaba. Lo que te puedo contar es lo que me pasó a mí en ese recorrido, que si le pasaba a otro actor hubiese tenido otro recorrido. Y eso estaba bien también. La verdad es que otros recorridos hubieran descubierto otras cosas diferentes a las que descubrí yo y viceversa. Así de aventurero es el recorrido de la composición de un personaje. La estrenamos hace 10, yo tenía 55 años y tenía que componer un personaje de 85 años con sus respectivas condiciones y vulnerabilidades. Y sí, yo la verdad que observé muchísimo a ancianos en condiciones vulnerables por la calle. Muchos. Tratando de ver, buscar, ser detallista. Y no me preguntes cómo, terminé sacando una composición entre mi padre y abuelo. Saqué muchas cosas casi sin proponérmelo. Mi padre y mi abuelo conformaron un poco este personaje, pero que no empezó con esa decisión. Mi padre tenía parkinson en el momento en el que yo estaba vivo y mi abuelo ya había muerto, pero no se me ocurrió observalos o detenerme en su forma de ser, pensar. Me fueron ganando. Yo ya quería ensayar con ropa acorde, no más con la ropa de calle y la verdad es que nada me venía bien. Y en un momento recuerdo a mi abuelo y cómo usaba él la ropa en esa época, los pantalones arriba del ombligo y entonces ya me coloqué el pantalón ahí y sin darme cuenta todo cambió. Entonces en un ensayo hago así y Juan me dice que estaba lindo. También vino el temblor de la mano izquierda de mi padre”.

Actualmente, el actor Eduardo Blanco se presenta junto al otro actor Luis Brandoni en la obra Parque Lezama.

Escucha el programa “Viva el Teatro” todos los lunes de 14:00 a 15:00 por www.radiozonica.com.ar

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