
Jorge Antonio Biglieri: “La clave que subyace a los autoritarismos tiene que ver con el miedo”
Interes General febrero 13, 2019El Decano de la Facultad de Psicologia de la UBA hablo en "Libre Pensamiento" sobre la servidumbre voluntaria.
El sometimiento de los pueblos a un déspota no es un tema nuevo para la psicología, como contó Jorge Antoinio Bilgieri: “Hay diferentes corrientes teóricas que intentan dar cuenta de este dato que es observable. Lo cierto es que, por ejemplo, tenemos una perspectiva psicoanalítica con Erich Fromm, con El Miedo a la Libertad, que él va a plantear básicamente que tiene que ver con el tema del miedo frente a las situaciones de cambio. Habla de un carácter sadomasoquista en relación a este tipo de posiciones”
“El Miedo a la Libertad” es un libro escrito por el psicoanalista y psicólogo social Erich Fromm publicado originalmente en los Estados Unidos en 1941. La obra exploraba la relación cambiante entre la humanidad y la libertad poniendo énfasis en las consecuencias de la ausencia de la última y en las condiciones psicosociales que permitieron la emergencia del nazismo.
Fromm iniciaba el libro haciendo una distinción entre la libertad negativa y la libertad positiva. La primera se refiere a la emancipación de restricciones como convenciones sociales implantadas por otras personas o por la sociedad, y para obtener este tipo de libertad históricamente se ha tenido que luchar. Sin embargo, de acuerdo con el psicólogo, este tipo de libertad por sí sola puede ser una fuerza destructiva a menos que esté acompañada por un elemento creativo que sería la libertad positiva. Esto necesariamente implicaría una conexión con los otros que va más allá de los lazos superficiales de las interacciones sociales.
En el proceso de volverse libre de la autoridad, los humanos quedan con sentimientos de desesperanza (comparable al proceso de individualización de un niño como parte de su desarrollo) que no desaparecerán hasta que usen la libertad positiva y desarrollen un reemplazo para el orden que conocían antes. Sin embargo, un sustituto común para la libertad positiva o la autenticidad es someterse a un sistema autoritario que reemplace el orden anterior con una apariencia exterior diferente, pero con la misma función para el individuo: eliminar la incertidumbre prescribiendo qué pensar y cómo actuar. Fromm caracterizó esto como un proceso histórico dialéctico en donde la situación original es la tesis y la emancipación es la antítesis. La síntesis sólo puede ser alcanzada cuando algo haya reemplazado el orden original y haya dado a los humanos una nueva seguridad. Fromm no indicó que el nuevo sistema sea necesariamente mejor, sino que, de hecho, esto solo rompería el ciclo de libertad negativa al cual la sociedad se somete.
La libertad, de acuerdo con Fromm, se convirtió en un asunto importante en el siglo XX, siendo vista como algo que debe lucharse y defenderse. Sin embargo, no siempre ha ocupado un puesto tan prominente en la mente de las personas y, como una experiencia, no es necesariamente algo que sea inequívocamente placentero.
Fromm enfatizó que los cambios en las condiciones sociales originan cambios en el carácter social. Nuevas necesidades crean nuevas angustias. Esto provocaría que los hombres sean susceptibles a ellas y que a su vez estas nuevas ideas tiendan a estabilizar e intensificar el nuevo carácter social y a determinar las nuevas acciones humanas.
“Hay otras posiciones que van a plantear un tipo de organización que sería casi de la especie, como antropológico. Nuestras características como sujetos sociales, gregarios y el tema de organizarnos en función de líderes a lo largo de toda la historia. De las organizaciones tribales en adelante, siempre aparece la figura de un líder. Eso sigue sucediendo en la actualidad, aún en los regímenes que intentan ser lo más horizontales posible, siempre hay liderazgos. En todo grupo humano hay liderazgos” continuó el decano de Psicología de la UBA.
“Por otro lado, más allá de las características que tendrán que ver algunas con lo intrapsíquico, otras con lo social, tenemos otra perspectiva psicológica también que va a plantear que una de las características fundamentales de nuestro funcionamiento y desarrollo evolutivo tiene que ver con nuestra búsqueda de la seguridad, el tema de sentirnos seguros.”
“Tenemos una serie de mecanismos psicológicos desarrollados a lo largo de la evolución que tienden a la búsqueda de la seguridad, que el medio ambiente se nos aparezca como previsible. Esto, en gran medida, justifica la naturalización de las situaciones.”
“Por ejemplo, salimos un día de casa, hacemos el recorrido habitual y, de repente, sucede algo que es inesperado, hay un auto incendiado. Eso nos sorprende, nos llama mucho la atención, lo comentamos con otros. Al otro día, salimos y volvemos a ver un auto incendiado, ya no nos llama tanto la atención. En la continuidad de la visión de autos incendiados, lo incorporamos como algo más del medio ambiente. De ese modo, nos vuelve la tranquilidad que las cosas son previsibles.”
Abunda una infinidad de diferentes perspectivas para abordar la temática, según contó Biglieri: “Uno lo puede ver desde una perspectiva más psicosocial, o una más estrictamente psicológica, de procesos psicológicos internos. Algunos son combinaciones.”
“Hay todo un desarrollo de un investigador americano, profesor de la Universidad de Nueva York, John Jost se llama. Él trabaja desde hace muchos años el tema de justificación del sistema. Porque, justamente, se hace esta pregunta ¿Cómo es que la gente se aguanta estas cosas?”
“Si nos fijamos, vamos a ver que la tendencia general, mayoritaria, es más bien conservadora. Por eso es tan importante poner límites a los mandatos, establecer periodicidad en los mismos. Está bastante probado la tendencia a votar lo que está, a lo que es previsible. Si nosotros vemos el funcionamiento de las sociedades, vamos a ver que hay cambios, porque las sociedades son dinámicas, pero, en general, siempre se intenta buscar la estabilidad.”
“Se produce un cambio, una movilización, por lo general lenta, que después se termina finalmente incorporando. Pero, al principio, siempre hay resistencia, y la tendencia siempre es a la estabilidad, la previsibilidad.”
Nacido en 1968, John Thomas Jost es un psicólogo social mejor conocido por su trabajo en la teoría de justificación de sistemas y la psicología de la ideología polítical. Ha contribuído extensamente al estudio de los estereotipos, los prejuicios, las relaciones intergrupales, la justicia social, y la psicología política: “Hay una investigación interesantísima donde él toma en republicanos y liberales, lo que vendría a ser conservadores y progresistas, y lo que hace es tomarles una prueba de personalidad para ver cuáles son los rasgos de personalidad que aparecen más marcados.”
“Lo que le da, es que, efectivamente, en el caso de los conservadores, tienen como mecanismo psicológico más marcado el tema de la necesidad de cierre cognitivo. En el caso de los liberales, el tema de la apertura a la experiencia. Por otro lado, los conservadores tienen menos tolerancia a lo imprevisible, en tanto los liberales tienen mayor tolerancia a la ambigüedad.”
“La necesidad de cierre cognitivo es un mecanismo psicológico que está bastante estudiado, hay una serie de muchos trabajos al respecto. Arie Kruglanski es la persona que desarrolló el concepto, es la característica presente en algunas personad de tomar un tipo de explicación y quedarse con eso, no ir más allá. Es la necesidad tener una explicación, que no necesariamente tiene que ser verdadera, y que una vez que se la adopta, no se la pone a prueba. Lo que anteriormente se conocía como dogmatismo.”
“Es característico de los conservadores, que tienen una tendencia a la estabilidad, y aparece como irrevertible, no es sencillo de modificar. Los cambios en las sociedades suelen ser graduales. Si vemos lo que pasa en los procesos revolucionarios, además de la situación abrupta –al menos la revolución rusa, la cubana y demás–, pasado el momento propio de la revolución, tienden al status quo, y cada vez más fuertemente.” Arie Kruglanski, quien colaboró con John Jost y otros por el dos mil tres en una teoría que considera a la congición social como motivadora de la ideología política; es un psicólogo social nacido en 1939 cuya teoría del closure, o cierre cognitivo, se ha aplicado a diferentes ámbitos, tales como la conducta del consumidor, las contrataciones en los negocios y la investigación política.
“Las sociedades que tienden a modificarse más fácilmente son las democráticas, porque es el propio sistema el que induce posibilidad de cambio. A partir de la recuperación del espíritu de liberalismo, de John Stuart Mills y el pensamiento ilustrado, lo que se va a plantear es el tema de las ideas y la búsqueda del progreso. Hay una impronta de apertura y de cambio, pero que va siempre de un sector a otro sector que tiende a ser más tradicionalista y conservador, las posiciones que definirían naturalmente a la centro-derecha y centro-izquierda; no a la izquierda revolucionaria, ni a la derecha reaccionaria.”
El decano explicó, con sus palabras, lo que precisaría la Argentina para progresar, sin sacrificar su libertad en el proceso: “Lo que se necesita es un sistema democrático que permita y potencie los desarrollos de la tolerancia y el intercambio, pero de la mano de un sistema de distribución que les permita a todos valorar eso que efectivamente se tiene.”
“No solamente evitar los cambios bruscos, el sistema tiene que proveer algunas condiciones y bienestar que hagan que la gente confíe en el mismo. Si nos salimos del sistema democrático nos caemos en sistemas que son de características más autoritarias, verticales, en donde la posibilidad del disenso no está garantizada por la propia lógica del sistema.”
“Cuando hablo del bienestar, la clave que subyace a los autoritarismos, y ahí volvemos al tema de Erich Fromm, tiene que ver con el miedo. El surgimiento de los movimientos de derecha en Europa, o desde una perspectiva de izquierda, pero antidemocráticos, tienen que ver con el miedo que se va instalando en la sociedad. Temor a perder sus condiciones de vida, su estándar, su lugar, su estatuto, sus tradiciones. Esto los hizo votar el Brexit, el neo-fascismo en Italia, el surgimiento de Vox como un falangismo en España.”
Podés escuchar “Libre Pensamiento” los martes a las 13:00 hs por La RZ.