
Luis Grimaldi: “Tengo mucho para decir porque hubo mucha gente silenciada”
Interes General marzo 2, 2019El periodista hablo en "La Gente que me Gusta" sobre la sociedad argentina y la familia.
Para Luis Grimaldi, la pasión por el periodismo viene de hace generaciones: “Recién ahora puedo entenderlo. Hace poco haciendo todo un trabajo de trauma social con Thomas Hughes, que es un médico austríaco que viene a la Argentina para hacer seminarios, realizamos una meditación en la que trabajé con mi árbol genealógico. En la devolución que le hice me di cuenta que tenía muy claro la parte de mi viejo, pero de mi vieja no, que eran italianos.”
“Me sentía como esas estatuas resquebrajadas, queriendo unir las piezas. Mi propio trauma, que arrastraba familiarmente, me llevaba a poder armar las piezas de esa estructura rota. En realidad, utilizaba la profesión para poder, de alguna forma, sanarme. Entonces, en cada entrevista y en cada cosa que hago, siento que estoy limpiando un poco mi árbol genalógico.”
“Todo vino en pedacitos y estaba roto, desarticulado, porque la gente se mueve por trauma, conflictos, guerra. La mayoría de donde nosotros venimos es de sistemas donde la gente no tendría que haberse movido de un lugar, pero se fueron por las guerras, el hambre o lo que fuere. Creo que cada uno de nosotros que estamos en la comunicación tenemos algo más atrás que descubrir de por qué queremos comunicar.”
“Tengo mucho para decir, porque en realidad hubo mucha gente silenciada. Como hubo mucha gente silenciada, callada o traumatizada en mi propio árbol, creo que me toca en esta vida abrir ese proceso, y la comunicación termina siendo una excusa para sanarme.”
El periodista realizó un balance social de la situación actual en Argentina: “Hay un contexto ya sistémicamente. Primero, quiero decir que todo es un sistema: una pareja es un sistema, una familia es un sistema, una estructura religiosa es un sistema, un partido político es un sistema, el tránsito es un sistema, el mundo es un sistema. Entonces ya tengo una mirada geopolítica y sistémica de las cosas.”
“Respecto del país actualmente, no concilio para nada con estas ideas políticas. Trato de buscar el salto cuántico, por ahí planteo algo utópico, porque no creo que se vaya a dar hasta que no nos abramos a otras cuestiones. No creo que haya otra forma de salir del país porque ya genéticamente viene con un problema de base, que es la inclusión. La solución es la integración del todo.”
“Es decir, si el día de mañana este gobierno pierde las elecciones, y el gobierno que viene no tiene la generosidad de llamar a los que han sido buenos en algo, no se rompe nunca más con esta guerra permanente de tomar el poder y destruir lo anterior. Es una sinergia constante, porque estamos en un antagonismo total, genéticamente no tomamos lo que pasó. Esto es una realidad virtual.”
“Este estudio no existía en algún momento, tampoco este edificio, los coches, etcétera. Estamos parados sobre los campos mórficos de los que habla Rupert Sheldrake donde acá hubo violencia, hubo abuso, muerte y vejaciones entre los conquistadores y conquistados. Por ende, como nunca hubo alguien que venga y haga un trabajo de integración entre lo que pasó.”
“Lo ves claramente en el caso del gobierno anterior sacando la estatua de Cristobal Colón. Cuando movés la estatua de Colón estás moviendo a mis ancestros, a todo lo que tiene que ver con donde yo venía, de donde viene mi familia. El gobierno que vino sacó la estatua de Juana de Azurduy, que representa los originarios. Ahí tenés perfectamente clara la grieta de por qué Chevrolet-Ford, River-Boca, Moria-Susana y por qué siempre estamos buscando una guerra permanente, porque no integramos lo que pasó.”
“No se trata de Colón o Juana, sino de Colón y Juana. Cuando vos te empoderás sabiendo que venís de lo aberrante y de lo pacífico, tomás las dos cosas, aceptás que sos el resultado del semen y la sangre, ahí realmente es empoderamiento. Hay países que lo han hecho y salen adelante. Un poco lo que hizo Pallaralols cuando fundió una bala de un inglés con una bala de un soldado argentino, eso es alquimia. Creo una nueva obra integrando lo que pasó, cosa que nosotros no logramos”
Sin embargo, para Grimaldi, ese cambio es todavía lejano para nuestra sociedad: “No está preparada la sociedad todavía, no aprendemos. Falta de humildad, hay mucho ego. Supongamos que mañana este gobierno está muy desgastado y gana el kircherismo con el peronismo, como una hipótesis. Si realmente Pino Solanas es bueno en medio ambiente, es el tipo que hace falta, no hace falta el Rabino Bergman, porque el que más sabe es él.”
“Si tenés que comerte el enojo y decís Margarita Stolbitzer me hiciste daño, pero yo te quiero en la oficina anticorrupción, porque sé que denunciando sos buena. Si Frigerio fue un buen jefe de gabinete, lo quiero de funcionario. Y así el que sea, si no hay un pacto de unidad, que casi se pudo lograr en un momento con Perón-Balbín, vamos a seguir siempre en la autodestrucción corruptiva. Vamos a estar constantemente fagocitándonos, y es una sinergia que no termina más.”
“El ejemplo tiene que venir de arriba, tiene que venir humildad y correrse del ego, pensar un poquito en el otro.”
No faltaron palabras respecto al discurso del Presidente en la apertura de sesiones del Congreso el pasado primero de marzo: “¿Viste cuándo te dicen que el que se enoja primero pierde? Básicamente vi un hombre enojado, a los gritos. No me gustó nada de lo que dijo, me pareció absolutamente indolente, anestesiado. Seguimos votando marketing, en realidad, porque es un producto de Durán Barba.”
“Si seguimos votando marketing, hay dos formas se salir: o no vamos ninguno a votar y los desempoderamos a todos, que no se va a dar tampoco porque es ilógico; o un pacto de unidad.”
“Creo que del otro lado se están dando cuenta, de hecho, cada vez que tengo la posibilidad de hablar con uno de ellos, lo hablo, les explico y les digo. Hay un libro de Bert Hellinger, que es mi filósofo de cabecera, llamado Después del Conflicto, la Paz, el cual recomiendo porque habla justamente de eso, poder salirse del enojo, con una pareja, un amigo, etcétera. Cuando vos te desenojás, te corrés del enojo, ganás, te abrís a una energía nueva.”
“En Macri veo una persona enojada, cada vez cerrada en sí mismo y además, al mismo tiempo, retándonos a los gritos en una cosa exagerada. Un hombre que no cree en sí mismo, no le veo credibilidad. Creo que tenemos un presidente que sufrió bullying desde la infancia y que todo lo que necesitaba era decirle al padre que era mejor que él. Me parece que ese fue su único objetivo, decir ‘Papá, yo soy mejor que vos’ y lo demostró cuando lo perdonó con la deuda. Ahí se puso en ‘Yo soy mejor’, y el principio de la violencia es cuando uno dice que es mejor que los demás. Ni él, ni yo, ni vos, ni cualquiera es mejor que nadie.”
“Creo que estamos pagando un precio muy grande por su enojo, es un niño enojado. Un niño malo y peligroso. El niño que lo habita a él es muy grande, demandante, tirano, caprichoso, enojado. Con el enojo no llegás a ningún lado, no podés crear nada. Es una energía trabada, una cosa que está cerrada, tenés que abrirte.”
“La culpa es del otro. Cuando vos depositás la culpa en el otro, te desempoderás, te hacés pequeño. Al asumir la parte de responsabilidad que te toca, lo que sea, por ejemplo, si hablás de una pareja, que es un 50/50, pero el desequilibrio a veces se da porque justamente hay un tomar permanente. Cuando se rompe el equilibrio entre el dar y el tomar, uno de los dos se hace pequeño y el otro se hace muy grande. Ya ahí, el desequilibrio es imposible que pueda reacomodarse. Veo que estructuralmente hay un desequilibrio muy grande, también.”
“No puedo ver la política argentina si no la veo como el T.E.G., creo que hay grupos de poder en las sombras que son los que manejan al mundo, y recomiendo mirar eso. El grupo Bilderberg, el grupo Richman, y los Illuminati. Entonces, cuando empiezo a tener esa información, empiezo a comprender el verdadero poder, el que subyace al poder que ‘vemos’. Para mí pasa a ser todo una especie de títere. Creo que Mauricio Macri está más condicionado por lo exterior que lo interior, lo que pasa acá. Su condicionamiento es más externo que interno, y las rendiciones de cuenta que tiene que dar porque nos entregó por completo.”
“Fijate que cuando Latinoamérica se quiso poner toda de pie, cuando todos los presidentes estaban unidos en fortalecer la región, de golpe todos se enfermaron. ¿Hoy, en la era tecnológica? Si buscás, lo tenés a Chávez hablando de terrorismo biológico. Es muy fácil inocular enfermedades. ¿Cómo puede ser que todos se enfermaron de cáncer? Yo adhiero a las teorías conspirativas. No es pavada lo que pasó, porque de golpe tenés una Latinoamérica parada fuerte que no le conviene a nadie, no le conviene a Europa ni al poder mundial.”
“Acá hay recursos, en Venezuela hay recursos, entonces seguimos dominados por la corona, es un país que sigue de rodillas todavía, alimentando a Europa y empobreciéndose, es un país víctima. Porque no toma su poder, no toma lo que pasó, así que no puede despegar. Te hacés fuerte cuando aceptás que un uno hay un potencial asesino, un potencial violador, un potencial destructor; pero también habita un pacifista, también habita el amor. Cuando soy consciente de todo eso, me corro de esa arrogancia de ser perfecto y de esa posibilidad que me están pidiendo, que no voy a lograr.”
“De hecho, el mejor trabajo que se puede hacer para que una persona sea feliz, que es un poco lo que resume mi trabajo terapéutico, es tomar a los padres tal y como fueron. Cuando uno hace eso, porque lo que pude comprobar es que la mayoría de la gente está enojada con los padres por lo que no le dieron, ahí te das cuenta de lo mínimo que somos.”
“Si vos entendés que la vida es algo que no podés devolver, que es algo muy grande y gracias a ellos podés experimentar lo que experimentás, podés vivir lo que vivís, el amor, la política, el fútbol, todo eso, ahí todo cambia. La mayoría de la gente está enojada con los padres, y es una pena, porque se pierde mucho tiempo.”
Podés escuchar “La Gente que me Gusta” los sábados 16:00hs por Radio Zónica.