Nelson Valente: “Trato de que los actores estén cómodos con el material”
Teatro marzo 11, 2021El director y dramaturgo charló en "Como Ganar Amigues" sobre su carrera y su presente.
Nelson Valente es un director, dramaturgo y docente de teatro, formado en la EMAD y en la Escuela de la Fundación Teatro del Sur. Realizó estudios particulares con los maestros Teresa Istillarte, Ricardo Bartís, Walter Neira y Eugenio Barba.
Ha sido Director de la Comedia Municipal, Regente de la Escuela de Teatro y Director artístico del Teatro Municipal de Lomas de Zamora. Es fundador y Director de la Compañía del Complejo Cultural Banfield Teatro Ensamble.
Se destacan entre sus creaciones “El loco y la camisa”, “El declive”, “Solo llamé para decirte que te amo” y “La Mujer que soy”.
El director habló sobre los inicios de la obra “El loco y la camisa” y contó que “era un numerito que hacía en un Café Concert. Cada semana, el director del teatro me proponía un tema y sobre ese tema escribía una escena de unos 20 o 25 minutos. Así que esa semana fue la del loco y la camisa, vi lo que pasaba en el escenario, lo que pasaba con los espectadores así que le propuse a los actores, por allá en el 2009 en septiembre, seguir el proceso para armar una obra. Tardamos cuatro meses y estrenamos en un departamento, donde la hicimos durante 2 años para 22 personas. La primera vez que salimos fue a Barcelona a un Festival y de ahí no paramos de viajar a México, Chile”.
En ese contexto, el director contó que “después del primer viaje a Barcelona, no paramos de ir allí todos los años siguientes. Nos propusieron una temporada más una productora y de ahí surgió una vida en Barcelona hasta el 2017. “El loco” es para nosotros una obra súper local, súper de Banfield y dijimos “qué le va a importar a los catalanes esto” pero funciono en Barcelona mejor que en Banfield. En general estas obras de tragicomedias tienen algo, una particularidad que desde el principio uno se ríe como si estuviera viendo una comedia y en un momento, promediando los 10, 15 minutos antes de finalizar, empezás a dejar de reírte”.
En ese sentido, el dramaturgo relató que “en Barcelona veíamos que la gente entraba en código desde el minuto uno de la obra. Esto era lo notable. Después aplausos de pie porque es raro que en Barcelona la gente se pare y no fallaba. Dijimos “es nuestro lugar en el mundo para hacer el loco”. Volvimos y recién ahí propusimos la obra para hacerla más seguido. Paso que nosotros íbamos a estrenar la obra en una sala, que era en un sótano pero se inundó porque tenían las napas que crecían. Yo había decidido que quería hacerla con el público rodeando el escenario, quería que la gente sienta un poco lo que uno siente cuando invita a alguien a cenar a su casa y se pelean la familia y vos sentís un poco la incomodidad. Quería un poco eso, romper esa cuarta pared. Había decidido que iba a poner muebles y donde no había muebles que hubiera un espectador alrededor de la escena contra las paredes”
En ese marco, el director contó que finalmente “no se pudo hacer en el sótano y un día dijimos “nosotros tenemos un departamento en este teatro”. Era un ensamble donde teníamos oficinas, había una cocina comedor que fue donde decidimos hacerla. Estaba todo como muy fácil, muy orgánico y ahí entraban 22 personas, por eso el numero.”
Además, Nelson Valente contó que “en general en mis obras los personajes también tienen un rol. El rol de este personaje que hacía en el Café Concert, tenía como una compulsión de decir la verdad y después termina siendo muy gracioso pero si ves la obra en general, más allá de un par de juegos que hace con las palabras, la característica que tiene este loco es que te dice la verdad sin filtro. Así que esta abordado desde ahí, que te dice lo que piensa sin los parámetros que tenemos en general en la sociedad. Un poco es la conclusión que uno saca cuando ves la obra, mostrar toda la locura a la que nosotros llamamos normalidad”.
Al finalizar, el dramaturgo dijo que “si el material es mio, tengo un poco mas de comodidad para que el actor participe conmigo. En general me pasa cuando veo una obra que me gusta, me gusta porque los actores están bien más allá del material: se los ve cómodos, orgánicos. Para mí es lo más importante que sientan ese material como propio orgánico, ese ratito. Entonces hago muchas cosas para facilitar ese trabajo y trato de verdad que estén cómodos. Si hay que cambiar palabras, como que tengo una obsesión de que no se vea ese tipo haciendo algo falso o artificial, por más que lo que está haciendo es falso. Quiero que esa mentira, ese engaño funcione y que el espectador se lo crea”.
Podés escuchar “Como Ganar Amigues” los jueves de 18:00 a 20:00 horas por La RZ.