Omar Sued: “A causa del Covid, se frenaron muchas actividades de prevención del HIV”
Salud diciembre 3, 2020El presidente de SADI dialogó en "Estrategia Salud" sobre la prevención del HIV en Argentina.
Omar Sued es un médico argentino, presidente de la Sociedad Argentina de Infectología y miembro de la Fundación Huésped. Es Director de Investigaciones Clínicas desde 2012. Es Médico recibido de la Universidad de Córdoba en 1995. Especialista en Medicina Interna y Especialista Universitario en Enfermedades Infecciosas (UBA, 2004), Máster en Manejo Integral del VIH-Sida (Universidad de Barcelona, 2003) y Doctor en Medicina (Universidad de Barcelona, 2016).
Se dedica a la atención de personas con VIH desde 1997 en diversos ámbitos públicos y privados de Argentina y España, prisiones y ONGs. Ha trabajado como asesor en proyectos de VIH en Tanzania y como consultor en varios países de Latinoamérica.
De 2009 a 2012 fue Asesor Regional para Tratamiento de VIH-Sida para la Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, desde donde apoyó la actualización de las guías de tratamiento antirretroviral en 18 países de la región.
El médico habló sobre su trabajo en pandemia y contó que “a fin de año se entrega el boletín anual de HIV pero el boletín es con un año de atraso. El que salió ahora es del año 2019 y en ese boletín vamos a ver una disminución de casos o de diagnóstico. Lo que hemos visto en el día a día aquí en Argentina ha sido que la pandemia ha parado todas las actividades posibles que hubiera habido de diagnóstico, de prevención y tratamiento. Entonces hay un montón de actividades que no se hicieron. Teníamos muchos centros de testeos rápidos, mucha gente que podía hacerse análisis, pero desde marzo a junio todos esos centros de testeos rápidos no funcionaron. Así que hay un montón de gente que no se hizo análisis de HIV y eso va a repercutir seguramente en una reducción importante de números de diagnósticos.”
En ese sentido, el especialista relató que “lo que más preocupa es que mucha gente tenía miedo de salir de su casa, porque tenía miedo de ser maltratadas por la policía por ejemplo, o porque tenía miedo de enfermarse y sufrir una enfermedad más grave. Por tener HIV, mucha gente dejó de ir a buscar los medicamentos, de ir a los controles. Los medicamentos estaban pero mucha gente prefirió no ir a los hospitales por ende suspendieron la medicación y es un riesgo grande porque tenés gente que tiene carga viral detectable, hay un riesgo de transmitir porque sabemos hoy que indetectable es igual a intransmisible. Es decir, si uno tiene una pareja que es HIV, que empieza tratamiento, cuando pasan 6 meses bien tratado la carga viral es indetectable, porque no tiene virus dando vuelta por su sangre. Esa persona no tiene virus en las secreciones genitales y no transmite a otra persona el virus, puede relajarse a la hora de buscar hijos, relajarse con su pareja estable, no usar preservativo porque ya sabe que no transmite. Es importante que lo tenga claro la gente porque para el paciente es una muy buena noticia porque lo hace sentir mejor, que ya no es una bomba de tiempo y para la familia también: vos tenés un marido, un papá que tiene HIV y está bien tratado, se corta o tenés relaciones sin preservativo y no te tenés que estar asustando”.
En ese contexto, el doctor contó que “muchas de las tareas y de las experiencias que vimos con HIV pasaron por Covid. El tema es que en 30 años lo resumimos en 6 meses con Covid. La epidemia de HIV entró a la Ciudad por Buenos Aires, entró en clase media alta, de gente que venía de afuera, se diseminó en esa clase media y después se distribuyó en las poblaciones más vulnerables, la que tenía menos acceso a servicios y eso es lo que pasó con el Covid también. Antes del Covid no había prácticamente en las provincias un lugar donde hacer un PCR y ahora por suerte se fortalecieron muchísimo todos los laboratorios de todas las provincias, que eso va a beneficiar al HIV porque es la misma máquina que se usa para saber la carga viral de HIV. Así que eso va a quedar eso que antes era algo difícil”.
Respecto a la posibilidad de una vacuna contra el HIV, Omar Sued adelantó que “en los dos casos tenemos la misma esperanza ya que venimos trabajando hace 30 años buscando vacuna de HIV. Recién ahora parece que hay una vacuna que parece que funciona, casualmente también es un adenovirus y es una de las tantas empresas que tienen vacunas para Covid que también está haciendo vacunas para HIV, que es de Johnson & Johnson. Esta vacuna para HIV ha mostrado en monos la eficacia en proteger del HIV en un 67% y en personas en la fase 2 demostró que es segura, que se absorbe bien, que no tiene efectos adversos. Ahora estamos en fase 3 y cuando terminemos más estudios vamos a poder saber si la vacuna del HIV tenga algo de eficacia, eso también es muy importante”.
Por otro lado, el especialista en Infectología dijo que “hoy parece una tontería que el 90% de los embarazos de hoy en día se diagnostican en la casas de las mujeres, van al baño y salen en 10 minutos sabiendo si están embarazadas o no. A nadie se le pasaría por la cabeza pensar que una chica de 16, 17 años se va a tirar de un balcón porque le dé un test de embarazo positivo. Sin embargo, hace 10 años que venimos insistiendo en la importancia que las personas puedan utilizar las mismas tiritas reactivas de HIV para usarlas en su casa y hacerse el análisis dónde más cómodo se sientan. Hay un montón de trabas burocráticas que impidieron eso, justamente por el miedo de que las personas con HIV se suiciden y haya eventos adversos. Sabemos que cuando la persona se decide a hacerse el análisis de HIV es porque tiene claro qué va a hacer con ese resultado y el riesgo de autoagresión sería el mismo que si fuera a un hospital a hacerse el análisis. Han hecho estudios en muchos países del sudeste de Asia y en África para ver si hay riesgo y en millones de muestras de estudios en África no hubo ningún suicidio asociado al autotest, no hubo otros efectos adversos importantes”.
En ese marco, el doctor afirmó que “lo importante es que eliminar el HIV de Argentina depende de que diagnostiquemos a las personas y que las pongamos en tratamiento. Mientras antes lleguemos a ese diagnóstico, más rápido vamos a poder hacer eso. Cuando vemos las experiencias de autotesteos por ejemplo en Brasil, un programa muy grande que repartió 10 mil pruebas de HIV a través de internet para que las personas se hagan el análisis en sus casas, el 30% de esas personas eran chicos gay con alto riesgo de adquirir HIV y que nunca se habían hecho una prueba porque siempre tuvieron vergüenza de ir a un hospital”.
Al finalizar, el especialista habló sobre la vacuna de Covid y dijo que “hay que tener claro que la vacuna de Covid no es la panacea, no va a ser la solución a todos los problemas y males. No es que el 2 de enero ya está en la Argentina y vamos a poder hacer el recital de Lollapalooza y una vida normal en el sentido de lo que hacíamos antes. Eso no va a pasar porque vacunar a una masa crítica de personas para que se produzca un efecto rebaño, que evite que la circulación del virus contagie a otras personas va a requerir muchos meses y muchas dosis de vacunas. Vamos a empezar con el personal de salud, después con las personas mayores de 60 y con eso vamos a estar vacunando hasta marzo, abril aproximadamente. Después con los menores de 60 con comorbilidades y después con toda la población. Todo eso va a llevar muchos meses y si en el medio no nos cuidamos podemos sufrir grandes brotes como los que vimos en algunas provincias. Por eso ahora en el verano viene gente con pocos virus a lugares con más virus y hay que ser muy cuidadosos y responsables”.
Podés escuchar “Estrategia Salud” los jueves de 16:00 a 17:00 horas por Radio Zónica.