Sergio Rulicki: “Usar el balcón fue parte de una impronta simbólica”
Política diciembre 11, 2015El especialista analizó los gestos de Macri durante la ceremonia de asunción
“Usar el balcón de la Casa Rosa fue uno de los macro gestos de una impronta simbólica. Además, no fue una cuestión menor haber tenido esta confrontación previa y no haberse expuesto a un contexto en el que podría haber sido abucheado”, dijo en “El Arranque” el especialista en comunicación no verbal, Sergio Rulicki.
Para Rulicki, “el hecho de haberse puesto fuertes en ese sentido fue una decisión sumamente inteligente, porque esta impronta inicial hubiese tenido un tinte negativo”.
Con respecto a los gestos del nuevo presidente durante la jura en el Congreso y la asunción en la Casa Rosada, dijo que “en lo gestual estaba muy feliz, tanto así que a veces tuvo un desborde emocional de su alegría genuina, como su baile”.
Prueba de esta genuina alegría serían sus “sonrisas bilaterales simétricas”.
“Cuando una persona eleva ambas comisuras simétricamente, es una alegría genuina. Cuando hay una elevación asimétrica, tiende a ser orgullo narcisista. Hay una foto de Daniel Scioli con María Eugenia Vidal. Si uno observa su boca, sus gestos, no transmitían nada que sugiriera las emociones de Vidal o Macri”, destacó.
“Hubo algunos momentos en que el presidente manifestó nerviosismo, algo totalmente normal dadas las circunstancias”, dijo.
“Me parece que tener un presidente que, aún en una situación ceremonial, en el momento de crear una impronta simbólica desde el liderazgo, se muestre genuinamente alegre, es un rasgo de optimismo. Hay alguien a cargo que no se siente iracundo ni temeroso. Tiene una emoción positiva sobre dos emociones negativas”, explicó.
Para el especialista, Macri marcó una gestión respetuosa de los deadlines. “Creo que ha sido muy importante la puntualidad, ha sido, quizás, una de las cuestiones más importantes”, opinó.
“El presidente representa un arquetipo que atraviesa todas las clases sociales. A pesar de su pertenencia a la clase más acomodada de la sociedad, tiene comportamientos y rasgos que lo asocian al común de los argentinos, como ser hincha de fútbol, o ser ‘jodón’, ya que hizo bromas tomándole los juramentos a sus ministros”, finalizó.