Silvia Pérez: “Hay un punto en común de la lucha de la mujer que también se abre a todos los géneros”

Teatro marzo 31, 2022

La actriz conversó con "El Espectáculo y Yo" sobre su último trabajo teatral y cómo la historia involucra la lucha de las mujeres y la reflexión en todos los géneros.

Silvia Pérez es una reconocida actriz, vedette y modelo argentina. Actualmente es la protagonista de “La última Bonaparte”, obra teatral en donde interpreta su carrera profesional vinculando a Marie Bonaparte, con su primer versión escrita por Walter Hugo Ghedin, y dirigida y versionada por Dennis Smith, presentada todos los sábados en El Camarín de las Musas (Mario Bravo 960, CABA).

Respecto al nuevo proyecto teatral, en donde interpreta a la última descendiente de Bonaparte, la actriz afirmó: En esta obra están entrecruzadas las vidas que parecen muy distintas, y siempre encontramos que en el escenario de la vida todos tenemos algo en común. Esta propuesta escénica que hizo Denise Smith, muy atípica. Porque primero en relación al argumento todos se preguntan cómo será, pero además de eso uno se encuentra con que es una puesta que tiene algo diferente, que tiene algo de cine dentro del teatro, que tiene una combinación de cosas como la música en vivo que acompaña a las emociones y los momentos. Es la vida de una mujer que luchó de una manera, con la vida de otra mujer que luchó de otra manera, pero son esas luchas que tenemos en la vida que nos van abriendo el camino, y que hace que reflexionemos un poco acerca de quiénes somos y de qué estamos haciendo. Se habla mucho del tema del placer, si bien el tema de Marie Bonaparte está en la historia enfocado en el placer sexual, acá se revaloriza eso en tanto esta mujer que está buscando el placer sexual. Se dio el placer de poder salir, en su época, a estudiar, a hacerse pasar por médica, ser discípula de Freud, a hacer un montón de cosas que en esa época no estaban permitidas y ella las hizo igual. Dejó su lugar de princesa, de vestido y bordados que se las encasillaron, para ir a buscar lo que ella quería sin importarle nada. Eso es muy valioso y creo que es muy interesante lo que plantea el escritor de la primera versión, y es algo que me llamó la atención.

Su relación con el autor de la historia, Walter Hugo Ghedin. Es la tercer obra que interpreto, hice “Delirio de amor” previo a la pandemia, y también escribimos un libro juntos, “Autogestionar la felicidad”. Además de ser un gran profesional, autor, psiquiatra y sexólogo, es un gran amigo. Ve la obra todos los sábados, porque además el relato que hago en la obra, junto a Mauro que es el alter ego de Walter y Denis. Cuando Walter me cuenta la historia de Marie Bonaparte le digo que la quiero interpretar, entonces empezamos a buscar a quien hiciera la dramaturgia y comenzamos a meternos en este mundo. Está muy encantado y emocionado, lo conozco hace muchos años y me conmueve ver la emoción que le genera ver la obra todos los sábados. 

En cuanto a cómo llegaron a cruzar su camino con Dennis Smith, Pérez aseguró: Llegamos a través de la directora del cine de la película Encarnación y muchas otras. Es muy amiga de Dennis, y cuando le damos la obra para que lea, uno en general cuando tiene una obra en la mano siempre busca la devolución de gente que admira. Ella me habló de Dennis, me dio una obra y me dijo que me iba a encantar conocerlo y trabajar con él, y así fue. Leímos una obra suya, que era un biodrama, un poco lo que se le llama ahora el hablar de la vida de alguien mezclando la ficción. Me comuniqué con él, e inmediatamente después de leer la obra de Walter, me propone hacer entrevistas conmigo para que le cuente cosas de mi vida, y la pregunta que transcurre a lo largo de toda la obra es “¿Por qué querés hacer a Marie Bonaparte?”. A partir de ese momento comenzamos a hacer videollamadas dos o tres veces por semana, él vivía en España y todo lo que transcurre en la obra es cierto. Empecé a contarle cosas de mi vida hasta que comenzaron a entrelazar nuestras historias de vida, entre la de Maria y la mía, y llegamos a responder esa pregunta en el teatro. Esa respuesta también tiene que ver con esta lucha en mi vida, con la mirada de los otros, con la construcción social que hay acerca del deseo, de los cuerpos. Hay un punto en común de la lucha de la mujer que también después se abre a todos los géneros, porque esto de querer agradar y lo que genera la mirada de los otros en uno, determina muchas veces lo que hacemos, elegimos y nuestros deseos. Es un buen punto de reflexión para que realmente uno pueda mirarse, y poder sincerarse y tratar de hacer lo que uno quiere en esta vida. 

La artista también comentó sobre el mayor desafío personal que pasó por su vida. No lo mediría como “mayor desafío”. Creo que el mayor desafío de esta vida es poder sincerarse y encontrarse, y encontrar esa dignidad que está dentro nuestro para poder honrar a este ser humano que somos, y está fallando bastante en la humanidad. Después, en la parte de confesarme con Denis en las entrevistas, me fue más natural esos momentos que después pasarlo por el cuerpo en el escenario. Una cosa es contar las cosas de tu vida y otra es encarnarse y tener que estar en esas instancias, como lo estoy en el escenario cuando rememoro mi infancia, en determinados momentos de los años 80. Todo eso, el vivirlo y atravesarlo durante los ensayos fue intenso. La exposición que tuve durante los años 80, en ese momento tal como lo cuento en el escenario, fue un poco el hacer lo que tenía que hacer por el deber ser, por los mandatos, y porque naturalizar como tanta gente el hecho de que era así, era mi trabajo y no pensaba más allá de eso. Lo cual no quiere decir que no me haya dejado secuelas, pero en realidad, hubo un proceso en el cual contar y narrar mi vida tenía otro tono, y después pasarlo por el cuerpo cada sábado es muy intenso. Así mismo amo trabajar, me parece que la actuación sana, se mete en lugares de la vida de uno y de los otros como ninguna otra cosa logra hacerlo. 

Para finalizar, Silvia Pérez compartió la emoción de todo el equipo de trabajo por tener salas llenas en todas las funciones y la devolución del público. Estamos contentos, sorprendidos, no lo esperábamos, y eso es bueno tambien. Cuando no esperas algo sino que lo vas viviendo apostamos a lo mejor pero las devoluciones son tan lindas. La gente creo que pasa un buen momento, pero también reflexiona y se emociona, a la salida los veo emocionados y es lindo eso, es como dar algo para que cada uno pueda pensar en uno, y eso me parece interesante.

Podes escuchar “El Espectáculo y Yo” todos los jueves de 18 a 19 hs por Radio Zonica