Viviana Osorio: “Para mi fue una experiencia muy fuerte”.
Sociedad agosto 11, 2023Viviana Osorio, la Hechicera del Bosque y autora de libros como "El viaje de Patrick" y "El umbral" pasó por "El Arranque" y desandó su enfoque sobre efectos paranormales.
Viviana Osorio le corre el velo a una situación que ha ganado un cariz público en las últimas semanas: la posibilidad real de OVNIS. “Los estadounidenses recién ahora lo están reconociendo pero la realidad es que tienen 100 años de información, y van soltando información porque se está visibilizando por todos lados. Por mi parte, hace muchos años que estamos con mi grupo en salidas y en investigaciones a partir de mi experiencia personal, que es desde donde puedo hablar. Con el grupo hemos viajado a un montón de lados desde donde fuimos recibiendo información. Tuve acercamientos con OVNIS y no lo olvido más. Ellos cuando aparecen es por un motivo puntual, para dejar un mensaje y siempre es por la humanidad. Y nadie es especialmente elegido, es decir, todos pueden tener esta información. Tiene que ver con una cuestión de auto alineamiento”.
“Hace muchísimos años que hago meditación, trato de estar en eje. O sea, ser coherente en todo esto. Para que te des una idea hay 60 razas diferentes de distintos planetas intraterrenos, además de los que están en otras dimensiones. Pero siempre aclaro que una cosa es un ser humano que murió y su espíritu por algún motivo está dando vueltas, y muchas veces se puede ver según la persona. Por ejemplo las médium tienen un contacto muy fuerte. Pero otra cosa son estos seres, como el caso de Antarel que mide 3 metros”, sostuvo.
Para Osorio se trató de “una experiencia muy fuerte porque estábamos con mi grupo meditando en medio de un bosque, posicionados de tal forma para recibir unos cristales que son como antenas que te alinean, eramos 15 personas en un bosque, hicimos la figura de una rueda de espaldas con los ojos cerrados, en un momento puse las manos hacia arriba. En una de esas, siento un peso en las manos y me dije ‘alguien me puso algo’. Cuando trato de ver de reojo observé un movimiento de cristales azules. Sentí el peso y el calor. Cuando escuché pasos cerca de mí pensé que era mi instructor, pero cuando abro los ojos veo un ser enorme al que le llegaba a la cintura. Era azul y luminoso, con traje pegado al cuerpo”.
“Me pegué un susto que grité y me tapé la cara. En ese momento llegó el instructor y me preguntó qué me había pasado. Es decir que él no lo vio. Me hizo bajar las manos, volvieron a aparecer los cristales y me ayudó a incorporarlos. Tiene que ver con la misión y el mensaje que tiene que transmitir. Al otro día tenía toda la cara quemada como si hubiera tomado sol y todo un sarpullido impresionante. Ahí me dí cuenta que lo que viví fue real”, concluyó.